La invasión bárbara en Extremadura se ha conocido gracias al Cronicón de Idacio, obra de Pablo Diácono, al que varios historiadores consideran nacido en Mérida y señalado como el primer poeta cristiano español. En el año 438 los suevos entran en Mérida pero no practicaron la segregación ni manifestaron ninguna superioridad.
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| Reino Hispano-Visigodo. De Gelaseico a Leovigildo (507-573) |
Las pocas palabras conservadas de origen suevo se referían a cuestiones agrícolas, las procedentes de los godos hablaban de guerra y saqueo.
La presencia germánica en Extremadura fue poco significativa desde el punto de vista idiomático, pese a la escasez de datos es posible rastrear huellas de algunos topónimos menores como Artobás perteneciente al municipio de Cabeza del Buey, en referencia al nombre de uno de los hijos del rey Witiza, citado por Antonio Mª Castaño en su estudio sobre los nombres de lugar en la Comarca de la Serena.
A finales del siglo VI, Leovigildo unifica bajo su poder la mayor parte de la Península Ibérica. Elimina al pueblo suevo que se asentaba en el noroeste y conquista la Bética a los bizantinos.
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| Basílica visigoda de Santa Lucía del Trampal (Alcuéscar) |
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